Cultivo las letras inspirado por la belleza y en ellas me sumerjo para buscarte; desde allí te hablo con la certeza de no resultar inmune a tu corazón que se acompasa con mi latir trayéndote hasta mí. Grita fuerte para que oiga tu pensar, piensa intenso para que escuche tu sentir.



martes, 13 de octubre de 2015

La verdad mentirosa


Otro día más intentando un imposible, rebuscando en las miserias que ni si quiera el olvido consigue ocultar a los recuerdos, pensando en huir, en desfragmentarme en diminutas partículas sin memoria a merced del viento, intentando crear la inmunidad necesaria para indultar la condena de mis sentimientos; otro montón de horas que se solapan y entremezclan entre si densificando el paso del tiempo, haciéndome más consciente aún del caminar de mi vida en la cámara lenta del estancamiento.

Cuando era joven no existía el tiempo en mi consciencia, sólo había que experimentar, como necesidad, vivir, formar parte de una concatenación de sucesos sin comienzo ni final, un hilván continuo en la costura del sin tiempo, sin cortes, sin pausas, sin eslabones perdidos entre la realidad y los sueños, todo uno en un mismo espacio: sonrisas, lagrimas, amor, celos, conspiración, lealtad, diversión, aburrimiento… se acababa el mundo y había que estar ahí  hasta el final sin siquiera saberlo.

Ahora tampoco lo se, ni siquiera estoy seguro de estar aquí en este momento cargado de relatividad, ni en que consiste la verdadera realidad, debieron llamarme sueño e impedirme soñar imposibles, ya que no se me puede conseguir, debieron desistir de educarme si después iban a cuestionar mis pensamientos, alguien les debería haber dicho que estaban creando un ser autónomo con consciencia de si mismo que podía tener ideas, relacionarlas entre si, darse cuenta de las cosas por su propio razonamiento, si, alguien se lo debería haber dicho, nos habríamos ahorrado una lucha absurda de desentendimiento, una condena al silencio, a la sordera que te arrastra a la soledad como único acompañamiento.



© jcs

No hay comentarios:

Publicar un comentario