Cotiza a la baja
un valor
que nunca tuve
mas fue lisonjero,
espejismo de ojos claros
atribulados por la calor
de una evidencia armada
en las sombras
del desapego,
hoy quiero renacer
y muero
solo como nací
dentro de mi agujero,
allí viví
conmigo estuve
mi único compañero.
© Juan Carlos Saceda
Que triste hibernar en solitario.
ResponderEliminarSaludos
Mucho, musa, nunca te acostumbras...
EliminarSaludos!